La increíble historia del sordo-ciego

Érase una vez un chico que nació con una grave discapacidad, nació sorod-ciego. La gente dirá, "joe menuda faena, ser sordo-ciego" pero a esa frasecilla sus padres siempre respondían lo mismo: "Pero ¿y tú qué sabes, a cuántos sordo-ciegos conoces?
Y esque amigos míos, esta discapacidad va mas allá de lo que la mente humana puede llegar a imaginar, sobre todo para los que le rodeaban, pues, el pobre desgraciado sólo podía gritar.
La gente de su barrio ya no se sobresaltaba cuando veía a un chico corriendo sin dirección (aunque parecía tener una tendencia involuntaria a dirigirse a la carretera), y gritando como si se le fuese la vida en ello mientras agitaba los brazos en el aire.
Pero Manuelito, que así se llamaba nuestro protagonista, era el chico más feliz del barrio, sobre todo desde que las obras de ampliación de Barajas llegaron al mismo....

(Esta historia no pretende ofender a nadie, por lo que la enfermedad que describe es completamente imaginaria fruto de mi verdadera enferemedad mental)