2010/09/19

En el feto

Al fin hemos conseguido llegar.
Estábamos perdidos cada uno en nuestro lugar remoto del mapa. Uno en lo profundo, agazapado en la niebla. El otro subiendo a los árboles para encontrar un hueco entre ramas,y tumbarse ahí a escuchar todos los sonidos de la sabana. El de más allá sólo perseguía leonas y cazaba mofetas.
Probablemente todos nos encontrábamos bien estando perdidos, lo supiéramos o no. Pero la tranquilidad no era completa. Parece que ahora ya sabemos cual es la montaña que queremos escalar.